Tras los éxitos del pasado Rallye de Gibralfaro, el Rallye de España tendría que ser la prueba donde seguir escalando de cara al objetivo final de año, que no es otro que el titulo de la categoría reina, al no haber titulo absoluto. Todo hacia presagiar un buen fin de semana de carreras por los rapidísimos tramos de Madrid, a todo ello acompañaba una espectacular puesta en escena con salida y asistencias en el Escorial.

Ya desde el tramo uno la cosa no pintaba muy bien, una cuchilla de la barra estabilizadora trasera se rompía y obligaba a realizar el bucle entero (cuatro tramos) con ella rota, con el consiguiente lastre que el equipo salvó con la mínima perdida posible de segundos.

Tras una asistencia y con Dani decidido a atacar llego el desastre, y digo el desastre porque todo el trabajo realizado se quedaba truncado por la rotura del cable de acelerador, una pieza recientemente sustituida y revisada y que la mala suerte quiso que estuviera defectuosa.

No nos queremos olvidar en esta crónica de nuestros principales rivales, felicitamos a Marcos/Ferro que ganaban el rallye y deseamos ánimos a Domenech/Sanchez que se veían obligados a abandonar por rotura en el ultimo tramo, así como felicitar a Ambit que lidera el campeonato.

Nuestra próxima prueba sera el rallye de casa, donde esperemos la suerte nos acompañe.